jueves, 17 de enero de 2013

El coste de los recortes

La actualización de este artículo se encuentra en el siguiente enlace: ¿Cuánto me está costando mantener su despilfarro?

jueves, 10 de enero de 2013

La salud de muchos, por el beneficio de unos pocos


La inmensa mayoría de los que tienen algún conocimiento sobre sanidad se han declarado en contra de la privatización de la gestión sanitaria. El rechazo ha sido prácticamente unánime. Firmas de 600 jefes de servicio y de un millón de ciudadanos, huelgas de los profesionales, decenas de manifestaciones que han inundado Madrid, dimisión en bloque de los directivos de 137 centros de salud, las sociedades científicas, todos los sindicatos del sector (que por primera vez se ponen de acuerdo en algo), y hasta el Colegio de médicos (que hasta hace poco, no es que fuera muy crítico con el PP) ha puesto el grito en el cielo.
Si casi todos los que conocen el tema, lo rechazan: será por algo ¿no?
Se antoja razonable sospechar que la decisión responde, única y exclusivamente, al favorecimiento de grupos empresariales relacionados directamente con el PP. Parece, por no decir que es, un atraco a la ciudadanía. Y, ¿alguien se ha creído aquello de "es por ahorrar"? Porque si es así yo le pregunto: esa afirmación… ¿en base a qué estudio? ¿fundamentada en qué datos? El PP no ha aportado ninguno que corrobore que la medida “recorta costes”. Ni uno solo. No hay estadísticas, no hay estudios, la decisión no tiene base.
Otros alegarán que “algo hay que hacer”. Por supuesto, aquí tiene soluciones con las que sí se puede ahorrar y no mermar, sino mejorar, la calidad.

Recorte de salud y de calidad, no de costes.

Las prestaciones, cuando se dan mediante gestión sanitaria privada, se reducen. Y el alcance de las mismas, también. Es la calidad la que se "recorta", no sólo el coste. El tráfico de influencias en la sanidad sale 'barato' porque el desconocimiento de la sociedad no sanitaria es total. Los ciudadanos ajenos al mundo sanitario no saben (ni imaginan) que privatizar la gestión sanitaria puede causar MUERTES. Cuando a un paciente, en un hospital "externalizado" le dicen "lo sentimos, pero no podemos hacer más", lo que el enfermo no sabe (ni imagina) es que en el público SÍ que harían más por curarle.
Tratamientos de quimioterapia, estancias prolongadas en la UCI, niños con cáncer, oncohematología, trasplantes de órganos, enfermedades raras, hemodiálisis, tratamientos crónicos de enfermedades como el SIDA... los hospitales públicos de gestión privada huyen de todas estas patologías y “derivan” a los pacientes que las sufren a los hospitales públicos 'puros'.
¿Qué pasará cuando un paciente crónico encuentre su hospital público, desbordado por los crónicos de su zona y los de las zonas de los externalizados?
¿Será consciente de que esa falta de recursos de su hospital público, está directamente relacionada con la privatización de los otros hospitales?
Si una empresa privada se mete en un negocio es para obtener rentabilidad, y esos pacientes NO son rentables. Así de simple. De verdad, pregunten a cualquier persona relacionada con el mundo sanitario.

Lo que está por llegar

Lo que se pretende hacer en Madrid es regalar la salud de muchos para pagar el beneficio económico de unos pocos. La sociedad no es consciente de la gravedad del asunto. Y lo peor de todo es que esto es sólo el principio. Solamente así se entiende la pasividad absoluta del Gobierno Central, ante lo que está ocurriendo en Madrid.
Ojalá algún día sean conscientes del daño que están haciendo y pese sobre sus conciencias. Muchos de sus votantes ya lo son: